Has tenido un día como tantos otros. Te preguntas por enésima vez qué dibujará el chico al que ves cada tarde en uno de los recodos del camino de vuelta a casa, ese de la gorra roja, pantalones oscuros y chaleco reflectante.
Seleccionas la música que escucharás hoy, siempre acompañando tu humor. Te pesa el traje chaqueta, pero todavía no.
Descubres la chimenea vomitando un humo denso, lento, cubriendo tu cielo.
Guitarra española desfilando sonidos medievales.
No te concentras. Aumentas el volumen. Solo conduces. Conoces esa carretera hacia la costa. Tantas veces recorrida, tantas veces odiada.
Necesitas un nuevo espejismo para vivir, un nuevo reto, un nuevo sol, el universo te estalla en los oídos.
Dormir hasta que el despertar sea más fácil.
Amarte y no pensar.
Soltar lastre
Seleccionas la música que escucharás hoy, siempre acompañando tu humor. Te pesa el traje chaqueta, pero todavía no.
Descubres la chimenea vomitando un humo denso, lento, cubriendo tu cielo.
Guitarra española desfilando sonidos medievales.
No te concentras. Aumentas el volumen. Solo conduces. Conoces esa carretera hacia la costa. Tantas veces recorrida, tantas veces odiada.
Necesitas un nuevo espejismo para vivir, un nuevo reto, un nuevo sol, el universo te estalla en los oídos.
Dormir hasta que el despertar sea más fácil.
Amarte y no pensar.
Soltar lastre